Un comunicado divulgado desde esa ciudad de la provincia de KwaZulu Natal precisa que los tres gobiernos brindarán anualmente contribuciones respectivas de un millón de dólares y buscarán fuentes adicionales de financiamiento.
El documento establece las bases para la solución amigable de posibles controversias, así como la posibilidad de su enmienda con el consentimiento mutuo y anuncia su entrada en vigor tan pronto las partes realicen sus respectivas consultas necesarias para darle el visto bueno y será válido por cinco años.
Para el establecimiento de este convenio Sudáfrica, Brasil e India tuvieron en cuenta los Objetivos de Desarrollo del Milenio establecidos por la Organización de las Naciones Unidas y que la pobreza es un obstáculo para el respeto de los derechos humanos.
Reconocieron que el desarrollo sostenible ofrece la prosperidad colectiva de los pueblos y que la cooperación Sur-Sur es una meta importante para conseguir un mundo con menos inseguridad alimentaria, desigualdades y mayor seguridad.
La declaración subraya que la colaboración entre los países en desarrollo es una vía para soluciones inmediatas, de mediano y largo plazos en el combate a la pobreza y la creación de condiciones necesarias para aumentar los índices de desarrollo humano.
La llamada Facilidad para Aliviar la Pobreza y el Hambre, conocida como el Fondo IBSA, fue fundada por estos tres países en 2004 y entró en vigor dos años más tarde.
Este organismo cuenta con el apoyo de la Unidad Especial para la Cooperación Sur-Sur que auspicia el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Su objetivo central es beneficiar a otros países en vías de desarrollo, en particular los más atrasados y a los que han salido de conflictos armados en todo el mundo, de conjunto con las Naciones Unidas.
Para alcanzar esa meta, Sudáfrica, Brasil e India utilizan métodos exitosos, tecnologías e iniciativas sobre la base de sus propias experiencias y trabajan con países interesados en utilizar esos conocimientos para su propio beneficio y enfrentar los desafíos en pos de alcanzar el desarrollo.
Los primeros proyectos del Fondo IBSA se llevan a cabo en Guinea Bissau, Cabo Verde, Sierra Leona, Burundi, Camboya, Haití, Palestina, Laos y Vietnam, donde promueven la seguridad alimentaria, salud pública, educación, capacidad constructiva, electrificación rural, entre otras muchas.